La producción hidrocarburífera en Río Negro acumula tres meses consecutivos de caída. Tras la implementación del barril criollo, a mediados de mayo, hubo un recupero que generó expectativas en el sector, sin embargo la actividad volvió a declinar al mes siguiente y se mantiene así hasta septiembre, según los datos oficiales.

Luego de varios meses a la baja, junio había sido el primer corte en alza desde el inicio de la pandemia. Para tener magnitud de la crisis en el rubro, en agosto del año pasado, la provincia extraía más de 30.000 barriles de petróleo por día (bpd).

La caída con respecto a agosto fue de 3,5% pero en comparación con septiembre pasado, cuando comenzó la crisis en la industria, la cifra ronda el 20%. Así se desprende de los datos oficiales de la Secretaría de Energía de Nación.

En octubre la extracción en el territorio rionegrino fue de 24,967 barriles de petróleo por día (bpd). El mes anterior había estado por encima de los encima de los 25.000, por lo que la merma diaria fue de 106 barriles por día, una cifra menor, pero que marca el declino que viene sufriendo la industria desde hace más de un año.

Desde el gobierno rionegrin informaron que se mantienen las mesas de diálogo con las operadoras para aumentar la actividad y la producción. La secretaria de Energía, Andrea Confini, detalló que hubo algunos avances pero que la situación es compleja, sumado a que la mayoría de los yacimientos provinciales son maduros.

“El declino de la actividad tiene que ver con que son yacimientos muy maduros, sumando al parate de la actividad. Nosotros estamos trabajando en las mesas de enlace para reactivar. Estamos atravesando una crisis que comenzó con la caída del precio del barril, luego se sumó la pandemia y la crisis económica que frenó la actividad hidrocarburífera”, indicó la funcionaria provincial al diario “Río Negro”.

Confini detalló que “recién” las empresas están comenzando a generar movimientos en algunos yacimientos. “El esquema general es que de a poco se está reactivando”, afirmó.